jueves, 9 de agosto de 2007

Ante el escándalo de la valija con US$ 800 mil, Kirchner dijo que "por primera vez se combate la corrupción"

OTROS TIEMPOS. El presidente Kirchner, De Vido y Uberti, durante un acto en la Casa Rosada en febrero de este año. (Presidencia de la Nación).


En un día complicado para el Gobierno por el escándalo del venezolano que intentó ingresar al país una valija con 800 mil dólares sin declarar y el posterior desplazamiento de uno de los funcionarios que habían compartido el charter aéreo, pagado de ENARSA, que trajo al empresario al país, el presidente Néstor Kirchner aseguró hoy que "por primera vez en esta Argentina se combate en serio la corrupción". Y advirtió que perseguirá la verdad "le toque a quien le toque, caiga quien caiga, porque yo no pongo las manos en el fuego por nadie". Aunque sin mencionar directamente el escándalo, el mandatario dijo: "Yo no tapo nada. Cuando algo pasa, tomamos las medidas como corresponde". Afirmó además que tiene "las manos absolutamente limpias" para que nadie lo condicione. Por el tema, esta mañana cayó uno de los funcionarios que habían compartido el vuelo con el venezolano. Se trata de Claudio Uberti, el hasta hoy titular del Organo de Control de Concesiones Viales, un área que estaba bajo la órbita del ministro de Planificación, Julio De Vido. Fue el mismo De Vido quien esta mañana confirmó el desplazamiento de Uberti al afirmar que se le pidió la renuncia al funcionario porque consideró que fue "un error" haber permitido que ese empresario, Guido Antonini Wilson, utilizara el charter aéreo que había contratado ENARSA. "Concebimos que hubo errores al subir a esta persona al avión y le solicitamos la renuncia al cargo, que me acaba de entregar y que acabo de aceptar", afirmó De Vido en declaraciones radiales. "Uberti en Venezuela realizó tareas muy importantes y cuando hizo algo que yo no fui consultado y hubo un error el hombre renuncia", agregó. Uberti es quien comandaba las millonarias negociaciones comerciales con Venezuela, desde los convenios con PDVSA a la venta de maquinaria agrícola, y era catalogado como la mano derecha de De Vido, aunque ahora es uno más de los funcionarios del área de Planificación sospechados. También está en el centro de la polémica el caso Skanska, en el que se investigan sobreprecios en la construcción de gasoductos. Por su parte, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, dijo hoy que hubo "un abuso de la buena fe de los funcionarios argentinos por parte de los venezolanos que le pidieron que traigan a una persona que traía una valija con semejante cantidad de dinero sin que nadie lo supiera". También defendió a otro de los funcionarios que viajaban en el charter, el titular de ENARSA, Exequiel Espinosa, de quien afirmó que "no tiene nada que ver con este tema". El charter que llegó el sábado pasado al país trajo, además de el venezolano y tres compatriotas, a tres funcionarios del Gobierno, entre los que estaban Uberti y Espinosa . El tercero era la joven jefa de Relaciones Públicas de ese mismo ente, Victoria Beresiuk. El chárter costó entre 60 y 90 mil dólares y fue pagado por ENARSA. Según la versión que ayer dio el Gobierno, los tres funcionarios habían viajado el jueves a Caracas para cerrar el acuerdo sobre el gas licuado. En tanto, la fiscal en lo Penal y Económico María Luz Rivas Diez explicó esta mañana que investiga si se trató de "un contrabando o sólo una infracción", ya que por ahora la Aduana abrió un sumario porque se intentó pasar el dinero en forma clandestina.
fuente: Clarín