Por: Luis Beldi
Se vienen días de tensión hasta la semana próxima, cuando se reúna la Reserva Federal para decidir la baja de las tasas de interés. La única duda que tiene el mercado es si el recorte será de un cuarto o de medio punto. Todos menos uno de 20 operadores de Wall Street sondeados por la agencia «Reuters» esperan que la Fed reduzca su tasa de referencia durante la reunión del 18 de setiembre. Quince de los consultados apuestan a que la rebaja será de 0,25% y cuatro creen que será de medio punto.La tasa está en 5,25% anual. Entretanto, los inversores mirarán los indicadores de crédito para el consumo de julio que se conocerán hoy, una cifra que no es relevante para los mercados pero ayuda a ver el futuro. Mañana se conocerán las cifras de comercio exterior de agosto y el miércoles las reservas de petróleo semanales. El jueves se difundirán cifras más relevantes: los pedidos semanales de ayuda por desempleo y las cifras del desempleo de agosto. Este último dato es clave. El viernes habrá dos informaciones: la producción industrial de agosto y el índice de confianza de la Universidad de Michigan.
Expectativa En cada uno de estos números los inversores mirarán si hay señales de que se avecina una recesión en Estados Unidos. Después de años de expansiónhay temor de que se acabela bonanza y por eso no se asumen riesgos. El problema es que no se sabe la profundidad de la crisis del mercado inmobiliario, porque las empresas siguen ganando dinero y presentando buenos balances en Wall Street. Es obvio que el sector inmobiliario es un gran generador de empleo y de actividad. La gran duda es cuánto más va a bajar el valor de las propiedades. Cuanto más caiga el precio, más serán los créditos hipotecariosincobrables. Como los inversores se están refugiando en los bonos del Tesoro de Estados Unidos, la renta que dan cayó al nivel más bajo de los últimos dos años. Pero a nadie le interesa la renta, sino que buscan seguridad. Por eso compran bonos del Tesoro, que tienen una renta de 4,36%, y no bonos de la deuda argentina en pesos, que pueden rendir hasta 15% en dólares.
Volatilidad Por esa ausencia de inversores del exterior, en la Argentina, bonos y acciones van a tener más volatilidad y las bajas serán superiores a las subas. No hay voluntad en el gobierno de solucionar la credibilidad del INDEC. Al gobierno le preocupa más la suba de los precios de la papa que el derrumbe de los bonos, que son su instrumento para lanzar deuda en algún momento.
Ambito Financiero