La justicia civil resolvió que solamente los pacientes pueden optar por un medicamento genérico de menor precio que la marca comercial sugerida por el médico, excluyendo de esa posibilidad a las obras sociales y a las empresas de medicina prepaga. Es a través de un caso en el que el En el fallo el juez Roberto Parrilli magistrado benefició a los padres de un menor de edad, a quien le recetaron una variante de la llamada "hormona del crecimiento", pero cuya empresa de medicina prepaga, Swiss Medical, le propuso otra de menor valor. El magistrado remarcó que es el enfermo quien tiene "la posibilidad de sustituir el medicamento recetado para acceder al mismo, no las obras sociales o empresas de medicina prepaga para ahorrar costos". "El derecho a la libre elección y a la debida información que debe brindarse a los adquirentes de los medicamentos... resulta un importante instrumento tendiente a prevenir la formación de monopolios o conductas especulativas", aseguró Parrilli. El magistrado tuvo conceptos elogiosos para con la ley de Medicamentos Genéricos, de la que rescató que le concede "al consumidor a quien se da la posibilidad de sustituir el medicamento recetado para acceder al mismo, no a las obras sociales o empresas de medicina privada para ahorrar costos". La marca de la hormona prescripta al niño de ocho años cuyos padres llegaron a la justicia, se aplicaba diariamente una vez, en tanto que la ofrecida por la prepaga, requería dos. El niño ya estaba habituado a la marca ordenada por el médico, lo que fue considerado por el juez, ya que según los informes especializados, "si el paciente abandona el tratamiento o lo hace en forma parcial, el efecto del tratamiento puede ser nulo". Por lo tanto, el juez Parrilli ordenó a Swiss Medical que le brindara al menor "la cobertura del 100 por ciento del tratamiento y medicación inidicada por su médica tratante hasta su curación definitiva y mientras dure su afiliación al sistema de medicina prepaga de la demandada".
clarín