lunes, 8 de octubre de 2007

El chofer de Lady Di estaba ebrio y fue encandilado por los fotógrafos


Mañana, el juez y los once miembros del jurado que investigan las causas de la muerte de la princesa Diana se trasladarán a París para inspeccionar el trayecto del automóvil hasta el momento de su choque fatal contra una columna del Puente del Alma, hace 10 años. Hasta ahora, son dos las novedades más importantes del juicio que tiene en vilo a Europa: el chofer, Henri Paul, estaba borracho y fue encandilado por los flashes de los fotógrafos” que perseguían a Lady Di y a su novio. Los “paparazzi” no la atendieron cuando agonizaba y siguieron sacando fotos.

Los flashes de los paparazzi (fotógrafos) que perseguían a la princesa Diana de Gales y a su pareja, el egipcio Dodi Al Fayed, por las calles del centro de París, encandilaron de improviso al conductor del Mercedes que transportaba a la pareja y provocaron el choque del vehículo contra la columna número 13 del Puente del Alma. Además, Henri Paul, el chofer, estaba borracho.
Estas han sido hasta ahora las dos principales revelaciones en la sala 73 de la Corte Suprema de Londres, donde los 11 miembros del jurado han tenido que analizar durante horas una serie de fotos inéditas y videos exclusivos de los últimos minutos de la pareja en la capital británica.
El jurado tiene previsto viajar mañana a París con el juez lord Scott Baker para seguir de cerca el itinerario del Mercedes hasta el momento de la colisión.
Según los peritos forenses convocados por el magistrado, los flashes reflejados en los lentes del conductor Henri Paul confundieron al francés, quien no reaccionó a tiempo y chocó el auto manejando a unos 110 kilómetros por hora contra la décimo tercera columna del Puente del Alma.

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